Manuel Antonio Velandia Mora, miembro del CFA, expone 10 de
sus fotografías de naturaleza en el
Hotel La Serena, ubicado en Altea, una Boutique
de arte que se caracteriza por su permanente exposición de piezas de
autores internacionales. La exposición se ha denominado La mirada serena de las
plantas; estará abierta durante todo noviembre.
Solemos no ver lo que nuestra mente no está
preparada para ver, solemos mirar desde
nuestras propias ataduras mentales y emocionales, nos dice Velandia. Para
este fotógrafo la sensualidad es la atracción que desde nuestra emocionalidad
reconoce como atractiva y estimulante una parte del otro; con esas mimas idea y
mirada las plantas y otros elementos de la naturaleza se nos antojan sensuales.
Esa es la idea de la que parte para fotografiar frutas y verduras, cuya visión
se antoja sensual e incluso erótica para el espectador que logra ver más allá
de la simple mirada.
Formas sinuosas, texturas que bien parecen
pieles humedecidas en el fragor del combate amoroso, líneas que recuerdan
fragmentos de cuerpo son las excusas de este fotógrafo colombiano para re-crear
lo natural, como una forma de recordar-nos que la belleza es natural y que la
sensualidad tan solo es la oportunidad de disfrutar de formas diversas y
placenteras a esos seres que amamos, a esas frutas y plantas que enriquecen
nuestro paladar y llenan de historias cotidianas nuestro existir.
Afirma el fotógrafo que con la pintura
barroca se abre un período marcado por una nueva valoración de los aspectos
sensoriales y por un cierto esteticismo, no exento de velado erotismo y
sensualidad, sin embargo las imágenes de Velandia aun cuando eróticas y
sensuales no tienen nada de barrocas, en ellas la luz desempeña un papel
fundamental en la definición de la imagen, en la emergencia de una calidez que
en contraste con las sombras supera el concepto clásico del espacio para
convertir sus fotografías en una expresión artística contemporánea.
Al igual que Edward Weston (1886-1958),
Velandia, mediante una cuidada iluminación llegar al ser del objeto, que se
transforma en una emoción sin perder su condición, es así como en un
acercamiento realista y directo, lleno de intuición y pureza, que desborda
sensualidad, un simple pimiento pasa a ser, para la vista de algunos, un cuerpo
retorcido.
El catálogo de la exposición de ha
producido por el artista en seis idiomas: español, inglés, francés, alemán, italiano y
valenciano, una idea acorde con la cosmopolita Altea y los tradicionales
visitantes de la Boutique de arte de La Serena. El nombre se ha traducido como:
A serene vision of plants/ La mirada serena de les plantes/ Le regard serein
des plantes.